Comenzamos nuestro tiempo de Cuaresma de una manera muy especial, entregándonos y ayudando a los demás, a través de nuestra oración, ayuno y limosna, para conseguir de forma simbólica subir la temperatura de nuestros termómetros. Sentirnos UNI.2 en esta tarea, también nos ayuda a caminar con Jesús en estos 40 días.